Bitácora del barco descolorida
La expedición no ha tenido un buen inicio. El clima ha estado en nuestra contra: hace una semana que zarpamos del puerto y casi no ha habido viento. Nos desviamos, por lo que consumimos más provisiones.
Isabella ha estado enferma, a veces durante días; ha tenido las mejillas enrojecidas y un estado febril. Grita dormida... Habla de sacerdotes vestidos de rojo y rostros perversos... Luego llama al hereje y hace preguntas extrañas sobre lo que ha prometido... azoth, la fuente de la juventud... la ubicación de esta isla misteriosa, “Vitae Aeternum”, que alberga todos estos secretos.