Esta carta está descolorida por el tiempo
Hace tres meses que hemos acampado en Desembarco Eterno. Esta noche, sin embargo, Isabella nos ha ordenado marcharnos por la mañana; dejaremos la seguridad del campamento y nos dirigiremos al norte, por el camino antiguo que los exploradores descubrieron hace dos días. Parece una jugada para trasladarnos a todos, pero los hombres dijeron que Isabella no confía en que queden hombres en el campamento, no después del escape de Velázquez, y teme más deserciones. Si viajamos todos juntos, podrá vigilarnos más de cerca.
Sea cual sea la verdad, no somos tan tontos como para cuestionar la orden que dio.
– Manuel.