Rivalidad entre pueblos

Creo que nuestra pequeña rivalidad entre pueblos está comenzando a desquiciar a Flores. Se lo veo en la cara cuando entramos en el bar. Es un buen hombre, y un buen tabernero, dicho sea de paso. ¡La mejor cerveza que puedas encontrar en los pantanos! Hasta nos fía las bebidas. Pero temo que su paciencia se esté agotando. La pelea de anoche con los de Periville acabó con una silla rota y media decena de botellas rotas. Ahora Flores espera que todos paguemos los daños y las bebidas. ¿De dónde espera que saquemos todo ese dinero? Es un buen hombre, lo juro, pero se está hartando de tanta pelea. Más nos vale ganar como sea la próxima carrera de pavos o voy a tener que saldar todo lo que debo.