En el Campamento podrido
El lago cercano nos da agua fresca y pescado, y la población de lobos de la isla nos da pieles y carne. Es toda una bendición estar aquí, en Aeternum, donde nada muere realmente. Esta tierra nos garantiza una fuente de alimento constante sin tener que esperar a que los animales se reproduzcan ni preocuparnos por cazar en exceso. El asentamiento es un lujo que no necesitamos. Aeternum provee de todo por sí solo.
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