Protección contra el daño
Te ruego, Madre Noche, que me ampares del daño y me concedas la victoria en la batalla. Te pido que hagas añicos las espadas de mis enemigos, astilles sus escudos, debilites sus cuerpos y ciegues sus ojos.
En aras de esta petición, Dama Oscura, te ofrezco la sangre de mis enemigos como libación sagrada hacia ti. Sé benevolente y propicia, y escúdame en tu sombra eterna.